jueves, 8 de febrero de 2007
el timido
Yo sé que a muchas personas les molestará como escribo. Encontrarán chabacano y cliché. Sólo tengo que decirles que escribo como pienso, no soy una experta para las letras y si es cliché es simplemente porque soy igual al general de las personas, con la diferencia de que cuento las experiencias que he tenido.
Quizás para explicar lo que soy ahora...en lo que me metí después de todas esas experiencias. No sé quienes me leen, sólo quiero expresar y reencontrarme.
Después de esa primera vez estuve con muchos hombres. En verdad muchos ni siquiera alcanzaban para ser hombres. Eran más bien adolescentes que veían en mi la oportunidad para sentirse adultos. Y muchos aprendieron cosas fantásticas conmigo. Uno de ellos lo recuerdo en especial, ya que era considerado dentro de mis amigos como el "perno". Sin embargo, eso a mi me excitaba. Que manera de calentarme al imaginarmelo gozando conmigo. Haciendolo feliz y sacándolo de esa represión que se notaba en su cuerpo. Y un día lo hicimos.Lo llamé estando sola y le dije que me ayudara a estudiar.
Él, obviamente fue sin esperar lo que se encontró. Al principio fui muy buena con él. Le obedecía en todo, le ponía atención, hasta que empecé a sobarme el pie en sus muslos por debajo de la mesa. No lo podía creer y me pidió disculpas sin darse cuenta que era yo la que me acercaba. Cuando cayó en cuenta de eso, se quedaba quietito...mi pie iba explorando aún más sus partes íntimas. Comencé a apretar con mis dedos de los pies su miembro, mientras el se hacía el tonto mirando el aburrido cuaderno.Luego, me encontré con lo que buscaba: botó el cuaderno y se me tiró encima. Me agarró por los hombros y preguntó que quería.
Yo le dije: " hagámoslo" solo hacía falta eso para que me agarrara de la cintura y me sentara en la orilla de la mesa. Me subió la faldita blanca de ese día y bajó mis calzones. Se agachó y comenzó a practicarme sexo oral...que lengua tenía ese chico!! y como se movía!. Después me bajé y lo llevé a mi pieza. Lo hicimos sagradamente todos los días en que "estudiabamos". Era un huracán...movía fuertemente sus caderas metiendolo por completo y hasta el final...Me gustaba amarrarlo a la cama y seducirlo con mi lengua. Partiendo desde sus orejas, yendo hasta el cuello, pecho, caderas, ingle....mordía su costado derecho de la entrepierna y se desesperaba del placer. Mordía un cojín para aguantar su grito.
Le hacía sexo oral mientras mis manos jugaban delicadamente con sus testículos, cuanto gozaba...A mi me encantaba que me cojiera lento...luego rápido...que tomara la punta de mis pechos y jugara con sus manos abajo. Era un buen amante, pero como todo, se acabó. Y se acabó por que comenzó a mezclar el amor... Yo sólo quería un rato de sexo. Que lata cuando mezclan el amor cuando uno no lo quiere. Muchas veces me pasó en que yo quería disfrutar y no pensar en el mañana. A veces decía: " te llamo" y dejaba por obvio que no lo haría...como no entienden ?Luego vino la época universitaria. Ahi la historia se me complicó...porque me metí en un sexo más fuerte...el sexo de quienes saben....continuará.-..-
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1 comentario:
Mira, hasta el momento te puedo decir que me calenté con tu blog, pero me temo que fue imaginándolos a ellos... :S
una puta... pues no sé. para serte franco, la visión que tengo del estereotipo en mi mente, me causa cierto rechazo. sin embargo, quizá sería una buena alternativa para tirarme a la piscina...
saludos
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